La poca importancia que los jóvenes salvadoreños le toman al trabajo de producir y generar sus propios alimentos imprescindibles que hace que sus precios tengan un alza.
Por: Selena Ramos.
La agricultura es uno de los rubros que por años movió la economía del país; sin embargo, con el paso de los años, esa importancia a disminuido, pues los jóvenes de las nuevas generaciones han cambiado la mentalidad tras la llegada del internet y ven el trabajo de hacer producir la tierra como una labor sin valor.
Melvin Ramos, ingeniero agrónomo expuso que “la agricultura es una parte muy importante en la vida del ser humano y al no contar con disposición de los agricultores para trabajar dicho rubro, se puede llegar a extinguir este tipo de siembras y el país puede tener una decadencia y esto hará que el precio en la alimentación sea el doble del que ahora está”.
El profesional comentó que un factor que hace que la agricultura se vea afectada, son las remesas que entran de los Estados Unidos (EE.UU) al igual que la tecnología, que son dos factores que hacen que ya las nuevas generaciones no piensen en cosechar, pues tienen todo a la mano.
La inmersión en las tecnologías ha sido una amenaza para las personas que trabajan la tierra, pues sus hijos, nietos o conocidos que están en una edad joven, pasan más tiempo viendo los teléfonos que interesados en labrar la tierra en la que viven. Esto en un mediano plazo ha generado la caída en la producción de alimentos que cada año se compran más caros porque son exportados de otras naciones y no producidos por los salvadoreños.
“Cuando yo estaba joven, mi mamá no recuerdo que nos comprará un teléfono, nuestro trabajo era labrar 3 manzanas de tierra para tener nuestros sagrados alimentos en la mesa, nosotros nos íbamos a trabajar a las 5 de la mañana y regresábamos a las 6 de la tarde, y ahora he visto que ya nadie quiere sembrar ya todos pasan con sus teléfonos en la mano y no les anhela nada y considero que, la llegada de la tecnología vino a arruinar a todo el mundo”, comentó María Colomba Bermúdez, residente de la comunidad Nuevo Gualcho, Nueva Granada, Usulután.
La era digital ha sido una revolución que ha transformado todo, ya que con el paso del tiempo las personas se enfocan en mejor emprender y pasar más tiempo en sus celulares, tratando de aprovechar el recurso, pero dejando de lado labores esenciales como la siembra de alimentos.
Según el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) El Salvador no produce la misma cantidad de granos para alimentar a toda una población y cada año se consume un total de 23 millones de quintales entre maíz, arroz, sorgo y frijol.
“Claro la agricultura es una parte importante porque si no se cosecha pues no podremos tener en casa nuestros granos básicos, pero con la tecnología considero que ya nosotros nos hemos enfocado más en estudiar carreras universitarias o más que todo pasar pegados a una pantalla del celular y ya no estar pensando en el trabajo de campo”, aclaró Gabriela Castro.
Todas las fuentes consultadas coinciden en la importancia y transformación de vida que han generado las tecnologías, pero lamentan que estas sean usadas indiscriminadamente y que, desde las familias, sobre todo rurales, no se siga impulsando la importancia de la agricultura como un factor de desarrollo y sostén en la economía de los salvadoreños.