El ministerio tiene más de una década en brindar la ayuda social en hospitales y zonas vulnerables de La Unión.
El ministerio “Pan y Chocolate” del Tabernáculo Bíblico Bautista Amigos de Israel en La Unión, fue creado con la intención de ayudar a indigentes y personas necesitadas a las cuales les entregan alimento para el cuerpo y ayuda espiritual.
El grupo de ayuda social tiene alrededor de 14 años de brindar sus servicios y está formado por colaboradores que pertenecen a la iglesia. Según el coordinador del ministerio, Saulo Orellana, la faena comienza todos los sábados a partir de las cuatro de la tarde dónde recorren diferentes puntos de La Unión.
Para cada jornada sabatina los miembros del ministerio preparan el alimento, el cual consiste en una cena típica con frijoles, huevo, plátano, pan y chocolate. Desde las 5:00 de la tarde visitan sitios como: La ex estación del ferrocarril, clínica de comunidad La Playa, la Casa de Espera Materna, la Segunda Avenida Norte, el sector Los Coquitos, la estación de Bomberos y culminan su recorrido visitando el Hospital Nacional La Unión. En cada lugar entregan las cenas y además hablan de su fe, para también alimentar el espíritu de los que ayudan.
“Nuestro principal papel es ir y predicarles el evangelio a las personas, pero no queremos llegar con las manos vacías, es por eso que llevamos alimento, que personas de calle y enfermos en los hospitales necesitan”, expresó Orellana.

Asimismo, los indigentes y enfermos que reciben la ayuda manifiestan que es una importante labor la que este equipo de personas realiza y dan gracias por llevarles alimento.
“Las personas, al llevarles los alimentos nos dan las gracias y se les puede ver el agradecimiento porque quizás ese día no iban a comer”, comentó Gerson Velásquez, integrante del ministerio.
Para quienes viven en circunstancias difíciles es de mucha ayuda recibir palabras de aliento por ello reciben con agrado el trabajo del referido ministerio. Los integrantes de este esfuerzo explicaron que conocen la necesidad de la gente y se unen al dolor que muchas personas enfrentan en las camas de los hospitales o el abandono en las calles y, según ellos, eso les motiva aún más para brindar ayuda.
“El Taber”, como lo conocen muchas personas, se ha caracterizado por realizar múltiples proyectos de ayuda social y uno de los más extensos a nivel nacional es Pan y Chocolate, beneficiando a miles de personas en los hospitales y las calles de El Salvador. Este esfuerzo tiene sus orígenes en el Taber Central, y se ha replicado el modelo en todas las filiales en todo el país.