El joven músico es también un amante de la fotografía y del diseño y está a punto de egresar como comunicador.
Cristian Ernesto Cruz es un joven dinámico, extrovertido y talentoso de 23 años originario de Lolotique, municipio de San Miguel que cuenta su pasión y dedicación por la música que lo ha llevado a diversos escenarios.
Su primera relación con la música fue a los 17 años y aunque desde muy pequeño tenía cierta afinidad por el arte, nunca se le había presentado la oportunidad de aprender.
Para él, el proceso que conlleva poder tocar un instrumento era frustrante, ya que además de tener amor, se requiere de mucha disciplina para lograr el dominio de instrumentos.
No obstante, en ese proceso Cruz aprendió que lo único imposible es aquello que no se intenta y fue en tercer año de bachillerato cuando el joven decide aprender en la escuela de música del maestro Henry Bladimir Ramos, en la sede del Instituto Nacional de Lolotique.
“Hasta el momento me siento orgulloso de ser de la última promoción que el maestro Bladi Ramos ensayó”, comentó el músico.
Según Cruz, la enseñanza se quedó a medias debido a la pandemia del Covid-19 y otros factores que afectaron todo el proceso de aprendizaje, a pesar de eso, dominó el trombón y con ese aprendizaje creció su vida artística.
A pesar de esa pausa por la pandemia, nada lo ha detenido y con cuatro años de experiencia que el joven posee de enseñanza musical, ha logrado llegar a diferentes lugares y hacer lo que más le gusta, transmitir alegría con su música de banda.
La Unión, Usulután y sin faltar su natal Lolotique son algunos de los lugares a los que Cruz ha llevado su música.
Además, a su experiencia le agrega la oportunidad que le brindaron de ser parte de la Sinfónica Oriental por un par de meses, proyecto que abandonó al poco tiempo para dedicarse de lleno a su proyecto personal.

El inicio de una historia musical
En el 2019 nace Banda Canela, luego de que Cruz llevara un tiempo practicando con los instrumentos y se decidiera a poner en práctica todo lo aprendido en su propia banda.
La idea arrancó de una charla entre amigos, donde con mucha ilusión el joven presentó el proyecto para fundar un grupo musical que les permitiera expresar su talento.
La banda tomó forma y arrancó con siete personas a bordo, y con el tiempo se fueron sumando cinco personas más haciendo un total de 12 integrantes que formaban la Banda Canela.
“Prácticamente iniciamos desde cero. No sabíamos ninguna canción, había compañeros a los que les costaba, incluyéndome”, dijo Joel Rodríguez integrante y también fundador de la banda.
El sacrificio y dedicación que estos jóvenes han depositado a la banda es grande, ya que no todo ha sido color de rosa a lo largo del proceso de formación.
En sus inicios algunas de sus carencias fueron la falta de instrumentos de percusión suficientes. Según los integrantes, tuvieron que realizar actividades para lograr comprar un bombo y a eso se sumó un redoblante, platillos entre otros, logrando con ello ser dueños de sus propios instrumentos.
Actualmente hay un total de 10 músicos: dos saxofonistas, un saxofón menor, dos trompetistas, un clarinete, un redoblantista, un trombonista, un bombista y la platillista quien es la única chica de la banda.
Talento y apoyo lolotiquense
Lolotique se reconoce por el talento que hay dentro del municipio y para Cruz, las influencias musicales que hay en su familia también lo marcaron para no abandonar su sueño.
“Mis primos que forman parte de la banda LL, me motivaron a continuar. Siempre me decían que no me diera por vencido, también Rafael, mi primo, músico de la banda Regimental de la Tercera Brigada de Infantería, fue un apoyo fundamental para mí, en los momentos que como banda nos sentíamos desanimados”, agregó el joven.

Comunicador y músico
Actualmente el joven estudia quinto año de Licenciatura en Comunicación Institucional y Periodismo en la Universidad Gerardo Barrios (UGB), pues su formación académica también es uno de sus grandes objetivos a concretar.
Entre sus planes a futuro están poder ejercer la carrera en el área de diseño o fotografía, ya que es otra de sus pasiones y en sus tiempos libres es fotógrafo profesional de eventos y elabora diseños de todo tipo.
También, en un lapso de cinco años se visualiza llevando su música a otro nivel, ya que otro de sus sueños es formar una orquesta profesional.
En su tiempo libre, le gusta ensayar y practicar clarinete, ya que es un instrumento que le gustaría dominar a la perfección.
Como banda, sus próximos proyectos son dar serenatas para días especiales y ahorrar para comprar una tuba, que es el instrumento que les hace falta para que el grupo suene mejor y ofrecer cada día un mejor servicio musical a quienes les piden amenizar fiestas con sabor a Banda Canela.