Las familias pueden asistir a la actividad cada sábado para hacer deportes, juegos variados, u otras actividades que fortalecen los lazos familiares.
Con el objetivo de brindar espacios recreativos, seguros y de fácil acceso, la Fundación Salvador del Mundo (FUSALMO), inauguró las tardes familiares en su sede, Polideportivo Don Bosco, San Miguel.
Las actividades comenzaron el pasado sábado y el espacio recreativo es para todas las familias que quieran pasar una tarde alegre, en un lugar agradable y de bajo costo.
Según los organizadores la idea de las tardes familiares surgió al ver que la crisis generada por el COVID-19 y como afectó la salud mental de los jóvenes y sus familias.
“Empezamos a tener muchas demandas de los jóvenes, ellos querían divertirse, pero no podían salir de casa, y tenían que estar con sus familias. Entonces fue cuando comenzó la posibilidad de las salidas con los clústeres y pensamos que nuestros espacios eran muy grandes y por qué no organizarles algo a las familias, disminuyendo así sus tensiones, por el trabajo, el estudio y otros”, mencionó el Gerente de Educación de FUSALMO, Alfonso Víquez.
En las tardes familiares de FUSALMO, podrán encontrar diferentes formas de pasar una tarde amena, se pueden hacer deportes como, fútbol, baloncesto, realizar picnics, aeróbicos, entre otras actividades, todo en un espacio amplio.
“Junto con mis compañeros somos parte de este proyecto, ayudamos a implementar las tardes familiares por medio de los deportes, así las familias pueden realizar actividad física, nosotros somos los encargados de los deportes que se realizan”, mencionó Edwin Castillo, encargado del área de deporte en las tardes familiares.
De igual forma, en la sede de Soyapango esta actividad se realiza desde hace 22 días, mientras que en las sedes de Santa Ana y San Miguel, comenzaron el pasado sábado. El costo para la entrada a esta actividad recreativa es de $0.50.
Las autoridades señalaron que por el momento evalúan este precio, ya que como fundación no quieren lucrarse de estas actividades, al contrario, el objetivo es apoyar a los niños y jóvenes.
“Queremos cumplir con nuestra misión tal y como Don Bosco lo decía, espacios para que los jóvenes pudieran crecer dignamente. Y eso lleva en cuenta a las familias. Esperamos que poco a poco se vaya difundiendo que tenemos estas actividades y así más personas puedan darse cuenta”, mencionó Víquez.
Al lugar llegaron varias familias que se divirtieron, siempre siguiendo los protocolos de bioseguridad.
“La actividad está muy bonita, sobre todo porque la hicieron un sábado por la tarde, y los niños, así como nosotros los adultos podemos despejarnos un poco del estrés de la semana”, destacó una asistente.