El medico Langenfeld certificó que la muerte de Floyd fue a causa asfixia no de un ataque al corazón.
El expolicía Derek Chauvin, acusado del asesinato del afroamericano George Floyd es procesado por los cargos de asesinato en segundo grado, penado hasta con 40 años de cárcel, asesinato en tercer grado, con una condena máxima de 25 años, y homicidio en segundo grado, con hasta diez años de privación de libertad.
Luego de ser uno de los cuatros participé en el arresto de Floyd un afroamericano que pagó con un billete falso en una tienda de Estados Unidos, a quien Chauvin lo inmovilizó en el suelo presionando la rodilla contra su cuello hasta que dejó de respirar.
Aunque la defensa de Chauvin manifiesta que fue un ataque al corazón, el médico que certificó la muerte de Floyd manifestó que el motivo más probable de su muerte fue una hipoxia; es decir, por falta de oxígeno en el cerebro y otros órganos.
El medico Langenfeld, quien trabaja en el Centro Médico del condado de Hennepin, Minesota, fue uno de los testigos citados a declarar este lunes en el juicio contra Chauvin por la muerte de Floyd.
Durante su testimonio, explicó que trató a la víctima durante 30 minutos el pasado 25 de mayo, en el que los médicos intentaron reanimarlo. «No hubo ningún trauma significativo u obvio que sugiriera que sufrió algo que le produjera una hemorragia que llevara a un paro cardíaco», dijo Langenfeld.
Sin embargo, como el ex policía no tiene antecedentes penales, solo podría ser condenado a un máximo de doce años y medio de prisión por los primeros dos cargos y a cuatro años de cárcel por el tercero.